INTEGRAL DE BEETHOVEN II
La creación de Beethoven para el género de concierto para piano y orquesta está canónicamente considerada como un corpus de cinco obras, aunque subsiste un «concierto nº 0», de su adolescencia, del que sólo sobrevive la parte de piano. Beethoven era famoso por su genio como improvisador al teclado, y los números 1 y 2 son obras de juventud, enteramente anclados en la estética dieciochesca. El giro se produce con el nº 3, un avance formal del que el propio compositor fue muy consciente. Hay un acuerdo bastante mayoritario en que el de mayor originalidad y redondez es el nº 4, de en torno a 1808. El quinto, tal vez el más célebre y equilibrado, de 1809, fue rápidamente bautizado como “Emperador” en clara oposición al sentir del compositor. Beethoven no llegó a completar ningún otro concierto en los dieciocho años que le quedaban de vida. No llegó a finalizar un sexto, cuyo primer movimiento ha sido completado por el famoso musicólogo británico Nicholas Cook.
Concierto incluido en el Abono de Temporada. El periodo de venta de este abono ha finalizado.